Al igual que la Ópera, el Puente de la Bahía de Sídney, o los rascacielos de Hong Kong, numerosas ciudades y monumentos del mundo apagaron este sábado las luces por la Hora del Planeta, un evento contra el cambio climático que en breve llegará a Europa.
De Nueva York a París, se espera que millones de personas de 170 países y territorios participen en esta cita anual para alertar sobre el calentamiento global causado por la combustión del carbón, el petróleo y los gases de los automóviles y plantas de energía.
En la capital australiana, muchos edificios del puerto apagaron sus luces durante una hora desde las 20h30 locales, marcando el comienzo de la acción en todo el mundo.
Desde Australia, las luces han comenzado a apagarse a través de Asia, donde el skyline de Hong Kong se oscureció, mientras que en la pagoda más sagrada de Birmania, Shwedagon, 10 mil lámparas de aceite se encendieron para brillar por la Hora del Planeta. En Pekín, la sede de la televisión china también se quedó a oscuras.
En Singapur, sedes de más de 200 organizaciones, incluyendo los edificios del icónico skyline de la ciudad-estado apagaron sus luces para la ocasión y miles de personas participaron en una “carrera sostenible” por el planeta.
En Japón, el famoso edificio Sony de la avenida Ginza de Tokio dejó de brillar en homenaje a la Hora del Planeta.